Obesidad Infantil: 8 Recomendaciones para prevenirla
Los niños con sobrepeso u obesidad tienden a convertirse en adultos obesos con patologías asociadas (diabetes, enfermedades cardiovasculares, etc). Por eso es fundamental prevenir el desarrollo de la obesidad, y en el caso de que esté presente, tratarla a tiempo para evitar que se vuelva crónica.
¿Cómo podemos prevenir la obesidad infantil?
5 Recomendaciones Fundamentales:
1- El cambio de hábitos sólo puede ocurrir cuando hay motivación propia. Ya que la obesidad a menudo afecta a más de un miembro de la familia, el establecer hábitos sanos de comer y hacer ejercicio regularmente como actividad familiar puede favorecer al niño. (Sabemos que existen “ambientes obesogénicos” y no sólo personas obesas).
Es importante mejorar la alimentación de toda la familia para que el paciente pueda comer lo mismo que el resto, y no sentirse excluído.
2- Es fundamental aumentar el movimiento y la actividad física del niño. Lo recomendable es que al menos 4 veces por semana realice actividad física. Y el fin de semana intenten salir juntos a realizar alguna actividad recreativa que implique movimiento, como andar en bici, jugar al fútbol, caminar por las sierras, pasear al perro, etc.
3- Los padres de un niño con sobrepeso deben mejorar la autoestima de su hijo enfatizando sus puntos fuertes y cualidades positivas en vez de enfocarse en el problema del peso. Es importante la participación de toda la familia para acompañar y motivar al paciente durante el esfuerzo.
4- La formación de hábitos alimentarios saludables se guía desde los primeros años de la vida. Los hábitos que se adquieren en la infancia, perduran toda la vida y ayudan a tener buenas condiciones de salud. Ofrecele frutas y verduras todos los días, probando diferentes recetas y formas de preparación.
5- Enseñale a disfrutar de la comida. Trata de que coma alimentos diferentes cada día, de manera que la dieta sea variada. La presentación variada y agradable de las comidas, así como un ambiente tranquilo, estimulan en el niño el deseo de comer.
6- Procurá que coma acompañado. Compartir la comida permite integrarse a la familia, dar y recibir afecto, sentirse valioso para los demás y comunicarse. En la mesa (como en otros lugares y momentos) los chicos aprenden con el ejemplo. No solo están aprendiendo a comer, sino el hábito de la alimentación, el placer de disfrutar con la familia.
7- Estimulá al niño para que beba abundante cantidad de agua. Evitar las gaseosas, incluso las light o cero. Si bien estas no poseen calorías, tienen efectos muy negativos sobre el organismo, favoreciendo el sobrepeso: alteran la flora intestinal normal y provocan mayor avidez por el consumo de carbohidratos. Dejaremos este tipo de bebidas sin calorías solo para ocasiones de fiesta.
8- Proponele alimentos variados todos los días. Para mantenerse sano, el cuerpo necesita muchas vitaminas y minerales diferentes, y no hay ningún alimento que pueda, por si solo, aportar todos los nutrientes. Todos los alimentos son importantes, y más a esta edad.